Vista cansada, una patología común a partir de los 40 años por el Hospital Vithas Xanit Internacional
Suele ser una cuestión de tiempo. Casi todos, en algún momento de nuestra vida, empezamos a tener problemas para ver las cosas de cerca. Se trata de una patología común de la visión, sobre todo a partir de los 40-45 años, que, aunque técnicamente se denomina presbicia, es más conocida como vista cansada.
La presbicia o vista cansada es una consecuencia inevitable del paso de los años, una evolución natural de la visión ya que supone el envejecimiento natural del ojo por pérdida progresiva de la función del músculo que empleamos para enfocar y la pérdida de elasticidad del cristalino.
El Dr. Ángel Cilveti, Jefe del Servicio de Oftalmología del Hospital Vithas Xanit Internacional, nos explica en nuestro blog cuáles son los síntomas más comunes de esta patología así como sus posibles tratamientos.
Síntomas que avisan de la presbicia
La vista cansada es una patología que se manifiesta poco a poco. Lo primero que se percibe es una necesidad de alejar los objetos para poder enfocarlos de forma correcta. Esto suele acompañarse con dificultades de nitidez al ver objetos cercanos y leer letras pequeñas. Estos síntomas confirman la presbicia cuando, además, nos damos cuenta de que se extienden los brazos o levantan las gafas para no ver borroso. El picor o escozor de ojos al trabajar con el ordenador o mientras consultas las noticias en tu móvil y te cuesta enfocarlas, por ejemplo, son también síntomas de esta patología que hacen necesaria la revisión de un oftalmólogo.
Tratamiento
El Hospital Vithas Xanit Internacional cuenta con un Servicio de Oftalmología que dispone de la última tecnología para solucionar los problemas de visión. Con una sencilla operación se puede corregir la vista cansada, además de la miopía, hipermetropía y astigmatismo, pudiendo dejar de usar gafas y lentillas. La duración de la intervención es de pocos minutos por cada ojo y tiene un postoperatorio indoloro, lo cual permite volver a la rutina en poco tiempo y realizar, después de la operación, las actividades diarias sin necesidad de gafas, aunque el especialista facilitará indicaciones específicas en cada caso.
