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La cultura emprendedora, vista como una salida laboral

Cada vez son más los emprendedores que encuentran en el autoempleo una alternativa laboral en tiempos de crisis.

La provincia de Málaga se ha convertido en estos últimos tiempos en la segunda provincia emprendedora de España, sólo por detrás de Madrid y por delante de Barcelona. Con casi 2.900 sociedades mercantiles, creadas en los primeros ocho meses de este año, Málaga es la segunda provincia con más emprendedores por cada 10.000 habitantes, con una media de 19.6, según los datos de la consultora Axesor. De hecho, una de cada tres empresas creadas en Andalucía, nace en Málaga. Estos datos atestiguan que la cultura emprendedora se ha consolidado, convirtiéndose la iniciativa empresarial como una alternativa laboral en los tiempos de crisis.

Hombres y mujeres se han encontrado en un momento de recesión económica y la opción de desarrollar un proyecto empresarial se plantea como una oportunidad de introducirse en el tejido empresarial y autoemplearse con el objetivo de salir de la situación de desempleo. Según los datos del Termómetro del Emprendedor, realizado por la Asociación de Jóvenes Empresarios de Málaga (AJE) y el Instituto Municipal para la Formación y el Empleo del Ayuntamiento de Málaga (IMFE), durante el primer semestre del año, el comercio es la actividad preferida por los emprendedores. A este sector, le siguen la hostelería y restauración, la publicidad y marketing y comunicación y, finalmente, la consultoría-asesoría y formación.

Uno de los principales escollos con los que se topan los emprendedores es la financiación para iniciar una aventura de esta envergadura. Si las ayudas y la financiación pública se han ralentizado para obtener apoyo económico por parte de las administraciones, los créditos bancarios también se han frenado ante el desplome económico.

Otra de las dificultades que los emprendedores se encuentran a la hora de iniciar un proyecto empresarial es la de visualizarse y hacerse su cartera de clientes y proveedores. El asociacionismo se convierte, en estos casos, en una fórmula rápida de darse a conocer entre otros empresarios, a través de los encuentros de networking, así como las diferentes actividades que se organizan en las asociaciones.

Perfil del emprendedor
Hasta la fecha, circulaba la idea errónea que el emprendedor era un joven universitario, recién licenciado con muchas ganas de poner en marcha un proyecto empresarial. En la actualidad, con la recesión  y coyuntura económica que atraviesa el país desde hace cinco años, el perfil es mucho más variado y heterogéneo. Junto al joven empresario emprendedor, también coexiste el empresario consolidado que busca nuevas fórmulas de negocio, intentando encontrar nuevos nichos de mercado ante la obligada búsqueda de oportunidades, al mismo tiempo que se están dando casos de empresarios que con la crisis y ante la pérdida de sus antiguos negocios se han visto obligados a una reinvención de sus proyectos empresariales. Asimismo, hay quienes ante las escasas oportunidades en el mercado laboral se deciden por emprender como una alternativa en los tiempos de crisis.

De una manera o de otra, hay varios rasgos que caracterizan a los emprendedores: constancia y coraje o valentía en poner en marcha un negocio en un momento difícil y puntual y en un país, como España, en donde no se incentiva demasiado al emprendedor de la misma manera que en otros países de la eurozona o como el caso de EEUU que se premia y apoya a aquel empresario que tras varios intentos fallidos sigue intentándolo hasta que fragua su proyecto empresarial.

Junto a la búsqueda de una salida laboral, se encuentran otras motivaciones a la hora de decidirse por montar un negocio propio: posibilidad de libertad de horario (aunque esta idea es engañosa pues el emprendedor al final se encarga de hacer todas las funciones de una empresa); no tener jefe y hacer las cosas desde un criterio personal invirtiendo el tiempo vital a un proyecto propio y no ajeno y, finalmente, la idea de ganar mucho más dinero que en régimen de asalariado.

Bajo la premisa de la innovación y la reinvención, la formación constante y vocación de servicio son varios de los paradigmas que articulan la existencia del emprendedor para convertirse en consolidado empresario.

Mujeres emprendedoras
En estos tiempos de cambio y reajustes, el número de autónoma ha crecido con la crisis. En el caso de la provincia de Málaga, éstas han crecido con respecto a los años anteriores al desplome económico. Las mujeres están ganando terreno con respecto a los hombres y se han decidido a dar este salto al vacío y montar su propio negocio, especialmente en los sectores relacionados con el turismo, comercio, gastronomía y diseño. De entrada, son muchas más dificultades y problemas a los que han de enfrentarse, teniendo en cuanta que han de conciliar vida familiar con la laboral, una ardua tarea que si para una mujer asalariada es difícil, en el caso de una emprendedora se hace mucho más compleja.