ALERTA AL CONSUMIDOR: LOS PRECIOS DE LOS DIAMANTES DE LABORATORIO ESTÁN CAYENDO

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ALERTA AL CONSUMIDOR: LOS PRECIOS DE LOS DIAMANTES DE LABORATORIO ESTÁN CAYENDO

Atención consumidores. Los precios de los diamantes de laboratorio se están desplomando, sin embargo, algunos minoristas los están vendiendo a unas cifras altas comparándolos con los precios de los diamantes naturales. Los consumidores creen que están obteniendo una buena oferta, pero no es así. Los sintéticos se están comercializando a un 98 % por debajo de los precios de la lista Rapaport para diamantes naturales.

Los precios de los sintéticos están por todas partes. Walmart vende un anillo solitario de diamante sintético redondo, F-G, VS1-VS2 de 3 quilates por $ 2975, mientras que Blue Nile de Signet vende un anillo solitario de diamante sintético VS1 redondo G de 3,00 quilates similar por $ 8190. Esa es una diferencia del 275% para el mismo anillo.

Algunos joyeros están impulsando los diamantes sintéticos porque pueden generar enormes márgenes de beneficio. Esto no durará porque los precios de los diamantes sintéticos están cayendo a cientos e incluso decenas de dólares por quilate. Esto se debe a que están disponibles en cantidades ilimitadas.

Comprar o no un diamante barato como anillo de compromiso es una preferencia del consumidor. Sin embargo, los consumidores que gastan miles de dólares en diamantes sintéticos pueden estar pagando de más. Los consumidores deben ser conscientes de que los diamantes sintéticos no son como los diamantes naturales, que son raros y caros. Los diamantes sintéticos no son diamantes reales. No retienen valor. Los diamantes sintéticos no son diamantes reales.

Comisión Federal de Comercio de EE. UU. (FTC)

• 23.24 Uso indebido de las palabras "real", "genuino", "natural", "precioso", etc.

Es injusto o engañoso usar la palabra "real", "genuino", "natural", "precioso", "semiprecioso" o términos similares para describir cualquier producto de la industria que se fabrica o produce artificialmente".

Después de esta nota demoledora difundida por Martin Rapaport, que revela una realidad que la industria en su conjunto y en particular los detallistas no podemos ni debemos quedarnos impasibles. Las noticias que llegan desde Estados Unidos sobre la quiebra de uno de los mayores productores de diamantes sintéticos sólo hacen confirmar las noticias sobre el desplome inevitable de los precios de los diamantes sintéticos de laboratorio (Lab Grown Diamonds).

Más allá de las campañas de mercadotecnia y las noticias de las bondades del diamante sintético versus diamante natural, dejando de lado la carga emocional que tiene la compra de un diamante, bien para uno mismo, bien para regalarlo, en especial como anillo de pedida, la cuestión se podría centrar en la retención de valor.

 

 

Si pusiéramos el símil, por ejemplo, de la adquisición de una obra original de Picasso o una del mejor copista, está claro que la que retiene valor es la original porque es única, rara y genuina; el mercado internacional y las subastas confirman su precio mientras que la copia, aunque sea prácticamente imposible ver la diferencia, se puede reproducir hasta el infinito y su precio en el mercado fijado por la ley de la oferta y la demanda hace que estas últimas no retengan valor.

Los diamantes sintéticos cohabitarán en nuestra industria, pero serán los diamantes naturales los que por su valor y carga emocional tendrán más importancia para nuestros clientes. El diamante está asociado a muchas de sus características: el material natural más duro conocido en la actualidad, sus características físicas y ópticas que junto a  su utilización desde hace miles de años en la joyería se haya convertido en una gema legendaria y valorado en todos los rincones del planeta.

Miguel Gómez y Molina

Gemólogo Graduado DGG-GIA-IGE

Joyero forense GIA

Tasador IGE